2015, año negro para los trabajadores
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- Creado en Lunes, 22 Febrero 2016 06:18
Todos sabemos que vivir de nuestro trabajo no es fácil pero, ¿cómo nos fue a los mexicanos en materia laboral en 2015? Para ser francos, nada bien. Apenas comenzó 2016 y el presidente Enrique Peña Nieto comenzó dar cuentas alegres en materia laboral a través de mensajes televisivos y radiofónicos. De acuerdo con esos spots publicitarios, la creación de empleos había alcanzado cifras récord, incluso la más alta de los últimos 18 años. También señalaban que el salario se había recuperado y que ahora el poder de compra de los mexicanos era mayor.
¿Realmente estas afirmaciones son ciertas? Son pura fantasía. Muchos de esos miles de empleos que se crearon y que el gobierno federal presume como nuevos no eran precisamente nuevos sólo fueron registrados ante el Seguro Social como consecuencia de la campaña impulsada por el gobierno para promover que los informales pasaran a la formalidad. La cifra real de empleos creados está intencionalmente maquillada.
Y hablando de informalidad, 2015 también fue un año en que los empleos informales crecieron más rápidamente que los empleos formales y aunque esta tendencia se ha mantenido más o menos igual desde hace unos 10 años, el pasado no representó un cambio en ese sentido y más bien acentuó su crecimiento. Es tal la precarización de los empleos formales que cada vez más encontramos mayores ventajas al trabajar en la informalidad.
La precariedad consiste en el deterioro de varios aspectos en el trabajo, principalmente en cuanto al salario que ya no alcanza para nada, pero también en aspectos como la temporalidad, las exigencias de producción, los sindicatos, el acceso a la justicia laboral y el trato digno. La mayoría de estos aspectos se vio afectada negativamente en 2015.
En una encuesta levantada a trabajadores por el Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal) entre abril y julio de 2015 se pudo detectar que en promedio los trabajadores deben laborar nueve horas adicionales para completar el gasto, y que más de 60 por ciento realiza actividades accesorias como asear casas, vender ropa, zapatos, perfumes, o instalar un puesto en un tianguis para tener un ingreso extra que les permita adquirir los bienes indispensables.
Además, más de la mitad de los trabajadores labora subcontratada a través de una agencia de empleo y su permanencia promedio en un empleo es menor a medio año.
¿Qué pasa con los sindicatos y las juntas de conciliación y arbitraje? En cuanto a los sindicatos todos sabemos que desde hace casi 20 años desparecieron, es decir, los realmente representativos de los trabajadores. Ahora sólo existen los que protegen a las empresas e impiden que los trabajadores se organicen.
En cuanto a las juntas de conciliación y arbitraje, la reforma a la Ley Federal del Trabajo les dio mayores herramientas a los funcionarios para poder seguir haciéndose omisos en cuanto a la defensa de los derechos de los trabajadores, como los contratos a prueba y un mayor número de posibilidades para poder despedir sin responsabilidad para el patrón.
Así pintó 2015 para los trabajadores… y 2016 no parece tener una mejor cara.
*Vocero del Centro de Reflexión y Acción Laboral
Vía NTR